DESARROLLO HUMANO

El desarrollo humano es un proceso de ampliación de las elecciones de las personas. En principio, estas elecciones pueden ser infinitas y cambiar a lo largo del tiempo. Pero, en todos los niveles de desarrollo, hay tres elecciones esenciales: poder disfrutar de una larga y saludable vida, adquirir conocimientos y tener acceso a los recursos necesarios para poder contar con un decente nivel de vida. Si estas tres elecciones no están disponibles, muchas otras oportunidades permanecerán siendo inaccesibles. 

Pero el desarrollo humano no se agota aquí. Incluye elecciones adicionales, altamente valoradas por muchas personas, que comprenden desde la libertad política, económica y social hasta las oportunidades de ser creativo y productivo, poder respetarse a uno mismo y tener garantizados los derechos humanos. 

El desarrollo humano tiene dos vertientes: la formación de capacidades humanas tales como contar con una mejor salud, conocimientos, habilidades y el uso que las personas hacen de sus capacidades adquiridas para el ocio, para propósitos productivos o para tomar parte activa en cuestiones culturales, sociales y políticas. Si las escalas de desarrollo humano no equilibran finalmente ambas vertientes, pueden seguirse considerables frustraciones humanas.

De acuerdo con este concepto de desarrollo humano, el ingreso aunque importante es claramente sólo una de las opciones que las personas pueden desear tener. Pero no equivale a la suma total de sus vidas. El desarrollo debe, por tanto, ser más que la mera expansión del ingreso y la riqueza. Su foco son las personas.

United Nations Development Programme (UNDP): Human Development Report 1990,            New York, 1990.